Anexo SL o Estructura de Alto Nivel

Por Laura Delissi

Con las actualizaciones de las normas ISO comenzó a tomar fuerza un anexo que conocemos como SL o Estructura de Alto Nivel.

Muchas organizaciones poseen sistemas integrados de gestión, disponiendo de más de una norma de gestión implementada y certificada. Por supuesto que la combinación de normas a implementar variará según la organización, pero las más comunes son aquellas organizaciones que poseen un sistema trinorma donde se establece la gestión de calidad utilizando ISO 9001, un sistema de gestión ambiental implementando ISO 14001 y un sistema para la salud y la seguridad en el trabajo conducida por la ISO 45001.

Lo que sucedía antes de crearse el Anexo SL, es que cada una de las normas de gestión poseía una estructura, requisitos y terminología diferente, haciendo que aplicarla en las organizaciones fuese dificultoso y poco articulado, teniendo que gestionar documentación para cada norma de manera independiente a fin de cumplir con los requisitos que cada una de ellas disponía de forma individual.

Esta situación también requería que la documentación esté organizada en un formato que sea dinámico, y que permita la integración para trabajar de manera conjunta en la organización y a la vez individualismo para gestionarlas de manera particular según sus estructuras y necesidades.

La Guía 83 delimitaba la estructura de las normas ISO, pero la creación del Anexo SL en 2012 como suplemento ISO, con una Estructura de Alto Nivel, permitió una codificación independiente a cualquier sistema de gestión, de manera que se pueda trabajar con una estructura uniforme y más práctica frente a organizaciones que poseen sistemas de gestión integrados. 

La creación del Anexo SL se realizó mediante el Joint Technical Coordination Group. El principal objetivo era que los sistemas de gestión posean títulos, cláusulas, secuencia de cláusulas, definiciones y la mayor cantidad de texto idéntico. Este comité estaba formado por los jefes y secretarios de los comités técnicos de las normas de sistemas de gestión. Ahora si la estructura para todas las normas de sistemas de gestión nuevas y las que sean revisadas de ahora en adelante seguirán el mismo esquema.

La Estructura de Alto Nivel es una herramienta imprescindible, durante la implantación de los sistemas de gestión en las organizaciones, ya que facilita el trabajo de las organizaciones y de los auditores estableciendo:

• Textos introductorios para los artículos idénticos.
• Enunciado idéntico para requisitos idénticos.
• Términos comunes y definiciones principales.
• Sincronicidad de diferentes normas ISO
• Adopción de un lenguaje común
• Eliminación de la duplicidad de documentos.

La Estructura de Alto Nivel consta de una estructura general común. Es así que su contenido este cubierto por:

• Objeto y campo de aplicación
• Referencias normativas
• Términos y definiciones
• Contexto de la organización
• Liderazgo
• Planificación
• Apoyo
• Operación
• Evaluación del desempeño
• Mejora

En la actualidad, las normas ISO que siguen una Estructura de Alto Nivel son:

ISO 9001 “Sistemas de gestión de calidad”

ISO 14001 “Sistemas de gestión ambiental”

ISO 45001 “Sistemas de gestión de salud y seguridad en el trabajo - Requisitos y orientación para el uso”

ISO 22000 “Sistema de gestión de seguridad alimentaria”

ISO 27001 “Sistemas de Gestión de la Seguridad de la Información”

ISO 50001 “Sistemas de gestión de la energía — Requisitos con orientación para su uso”

ISO 22301 “Sistemas de gestión de la continuidad del negocio”

Por último, no debemos olvidar que siempre es importante generar las competencias en el personal que trabajará y aplicará las normas de gestión. De esta manera la organización asegurará la implementación de manera adecuada.

En algunas oportunidades puede bastar con un solo personal para llevar adelante el sistema de gestión, pero en los casos de organizaciones que implementen más de una norma, puede necesitarse un personal para cada norma y a su vez la interacción entre ellos para trabajar de manera integrada. En estos casos, las capacitaciones y formación del personal son críticas y la alta dirección debe comprender su importancia y mostrar un total compromiso con la generación de la competencia en el personal.

Lic. Laura Delissi